La consolidación en los servicios sanitarios

La fusión de hospitales y laboratorios privados no hará más que aumentar. Un informe reciente muestra que el volumen de fusiones y adquisiciones casi se ha duplicado¹. Los factores clave que influyen en la ola actual de fusiones y adquisiciones son la reducción de costes y el entorno cada vez más competitivo. La tendencia sugiere que se van a fusionar los laboratorios privados más pequeños, mientras que los laboratorios privados grandes se harán aún más grandes.

Esta intensa presión está afectando a algunas de las redes de laboratorios clínicos más grandes del mundo. No hace mucho, 200 trabajadores de laboratorio fueron despedidos,² y no se trata de un hecho aislado.³ Con las operaciones de fusión de los servicios sanitarios que se están acometiendo, muchos laboratorios se preguntan qué impacto tendrá esta tendencia en el panorama diagnóstico más amplio.

Frente a estas fusiones plurianuales y extremadamente complejas, ¿cómo se puede garantizar el éxito cuando el personal ya se ha reducido al mínimo?

Desde equipos, reactivos, suministros y proveedores, hasta la gama de pruebas ofrecidas y la utilización de pruebas, la variedad está muy presente en los laboratorios. Eso sí, tiene un precio. Las variaciones en los modelos de pedido de las pruebas pueden añadir costes innecesarios al sistema sanitario, pudiendo provocar retrasos en la atención, hospitalizaciones prolongadas o reingresos hospitalarios imprevistos.4 La eliminación de las pruebas obsoletas, las pruebas con poco o ningún valor diagnóstico, así como las que requieren envíos de alto valor económico, son propuestas atractivas. Las evaluaciones de conjuntos de pedidos y los algoritmos basados en las evidencias pueden ayudar a controlar el uso inadecuado de las pruebas y las consecuencias inevitables que suponen. También existen oportunidades más inmediatas gracias a la simplificación de las opciones de los ensayos.

Proporcionar calidad es la responsabilidad principal de un laboratorio. La variación excesiva en las pruebas ofrecidas puede hacer perder el tiempo, limitar la rentabilidad y afectar el rendimiento. Los laboratorios están cada vez más presionados para optimizar sus operaciones y tienen la oportunidad de hacerlo unificando las opciones de los ensayos. Las pruebas ofertadas deben basarse en la necesidad clínica. Tener en cuenta el coste, la utilidad y el tiempo de respuesta cuando se decide si conviene realizar internamente la prueba o es mejor externalizarla, puede ayudar a identificar algunas áreas de mejora. La optimización del análisis puede garantizar que se haga la prueba correcta al paciente adecuado en el momento apropiado para eliminar complicaciones potencialmente evitables.

En el futuro, la consolidación probablemente proporcione un mayor rendimiento. Suponiendo que existan las tecnologías adecuadas, los laboratorios deberían poder traducir esto en un servicio de mayor calidad. De este modo, podrían estar en la posición ideal para asumir un volumen de pruebas adicional, aumentaría el valor percibido del laboratorio y cubrirían mejor las necesidades de los pacientes.