La innovación continua suena muy prometedora a simple vista. El extraordinario crecimiento de las pruebas, así como las nuevas tecnologías y servicios, han revolucionado los sistemas sanitarios, y es previsible que esta revolución se acelere.1 Esto podría llevar a los sistemas de salud a los límites de su capacidad de prestación y obligarlos a hacer más con menos.
Hay cinco aspectos clave que afectan directamente a los laboratorios clínicos en este momento y que, aunque son todo un desafío, también son prometedores. Es previsible que estas tendencias afecten a la toma de decisiones en la asistencia sanitaria, ofreciendo nuevas oportunidades a los laboratorios para que demuestren su valor añadido para todo el sistema sanitario.
A medida que la asistencia sanitaria pasa de un modelo basado en el volumen a otro basado en el valor añadido, la automatización representa un camino prometedor para los laboratorios. La reducción de las etapas manuales liberaría recursos para centrarse en actividades que den al laboratorio valor añadido.
El mayor tiempo de autonomía de los sistemas puede incrementar la capacidad de los equipos humanos. Incluso los laboratorios más pequeños con presupuestos limitados pueden implementar soluciones de automatización de laboratorio personalizadas, que proporcionan beneficios de ahorro de tiempo similares a los que disfrutan los laboratorios más grandes. Liberar al personal para que realice tareas que aportan más valor añadido no solo aumenta la satisfacción en el trabajo, sino que también puede aumentar la productividad.
La consolidación generalizada entre hospitales y laboratorios está en marcha, sin signos de desaceleración. Según un informe reciente, el volumen de fusiones y adquisiciones casi se ha duplicado en los últimos cuatro años.5 Los factores clave que influyen en esta ola actual de consolidaciones incluyen la reducción de costes y un entorno cada vez más competitivo. Si bien es más probable que los laboratorios más pequeños sean objeto de fusiones o adquisiciones, es previsible que los laboratorios más grandes se vuelvan aún más grandes.
¿Qué impacto tendrá esta consolidación en el panorama más amplio de las pruebas diagnósticas y cuán diferente podría ser este panorama en los próximos años? La falta de adaptación pondrá a muchos laboratorios en riesgo de ser absorbidos o de cerrar. Los que sobrevivan se verán obligados a centrarse aún más en la rentabilidad, reduciendo la variedad de equipos y los proveedores de reactivos.
El mayor rendimiento ofrecido por estos laboratorios debería permitirles proporcionar un mayor nivel de servicio, colocándolos en una buena posición para ofrecer un mayor volumen de pruebas. Con el plan de acción adecuado, los laboratorios pueden aumentar su eficiencia operativa y su estabilidad económica para disfrutar de una mayor probabilidad de éxito a largo plazo.
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Las percepciones son difíciles de cambiar. Con frecuencia, los laboratorios se perciben como un centro que no genera beneficios, una parte necesaria y, a veces, menos innovadora del panorama más amplio de los servicios sanitarios. Esta subestimación se debe a la menor visibilidad que tienen los resultados del laboratorio en los resultados de los pacientes en comparación con la intervención médica. Si bien los laboratorios solo reciben alrededor del 2-3 % del presupuesto de las organizaciones sanitarias, fundamentan aproximadamente el 70 % de las decisiones clínicas todos los días.6
Ahí radica la oportunidad. Los profesionales sanitarios confían en resultados de laboratorio exactos y precisos para hacer bien su trabajo; la mejor atención posible al paciente requiere información de gran calidad. La influencia del laboratorio en el proceso decisorio es la razón por la que es imperativo que los laboratorios se comprometan con la mejora continua.
Pero, ¿el valor proporcionado actualmente por los laboratorios basta para salvarlos en medio de un sector dominado por la tendencia a la reducción de recursos? Dadas las presiones administrativas a las que tienen que hacer frente los laboratorios, dar con la respuesta puede resultar difícil. Sin embargo, las nuevas tecnologías pueden ofrecer la oportunidad de transformar las operaciones de laboratorio y aportar valor añadido.
La dirección de los laboratorios pronto necesitará explorar formas de proporcionar servicios más amplios a los médicos, ayudándolos a su vez a gestionar mejor a los pacientes con los recursos disponibles. Una forma de que los laboratorios aporten una atención basada en el valor es mediante el análisis de datos. Por ejemplo, si los datos cuantificables revelaran una oportunidad oculta de optimizar recursos, esa información podría compartirse en toda la organización, lo que se traduciría en unos mejores resultados y un mayor rendimiento del laboratorio.
Estos conocimientos también pueden ayudar a los laboratorios a proporcionar valor añadido más allá de los resultados de las pruebas diagnósticas. El análisis de los perfiles de solicitud de pruebas por parte de los médicos podría abrir las puertas para realizar pruebas más eficaces. Eliminar la infrautilización o la sobreutilización de pruebas podría reducir costes y posiblemente terminar con las rehospitalizaciones de pacientes o los retrasos en la atención.
Conoce por qué centrarse en el valor es tu mejor estrategia para la sostenibilidad.
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El entorno actual del laboratorio está en constante cambio y la presión para maximizar unos resultados de calidad nunca ha sido tan alta. Afortunadamente, la innovación, la digitalización, las nuevas pruebas y los equipos avanzados han generado una eficiencia y una automatización considerablemente mayores.
Estos avances desempeñan un papel clave al permitir tiempos de respuesta más rápidos, reducir los errores humanos y mejorar la entrega puntual de información importante para el paciente. Las tecnologías actuales pueden incluso automatizar el transporte, la clasificación, el acceso y la inspección de las muestras mediante el uso de herramientas mecánicas, electrónicas e informáticas integradas. Aprovechar las capacidades de datos de un laboratorio también puede contribuir a mejorar los servicios clínicos, como remodelar los flujos de trabajo de diagnóstico o tratamiento.
A medida que los laboratorios miran hacia el futuro, el desarrollo de sus capacidades de datos les permitirá construir unos cimientos basados en el valor añadido sobre los cuales podrán crecer. Para iniciar este proceso, los laboratorios deben auditar sus datos existentes y comprender cómo se utilizan. Este es el primer paso en la identificación de oportunidades para optimizar el uso de esta información. Al mismo tiempo, los laboratorios también deben considerar el potencial que ofrecen las nuevas tecnologías para aumentar la cantidad y calidad de los datos que generen. En un ecosistema cada vez más digital, estas nuevas capacidades de datos deberían posicionar a los laboratorios de manera favorable, dentro de la economía sanitaria de su entorno local.
Para garantizar aún más el éxito a largo plazo, los laboratorios deben adoptar tecnologías que se centren en la automatización, la consolidación, la integración y la estandarización. Esta combinación de beneficios probablemente se traduciría en flujos de trabajo de mayor calidad y más eficientes, lo que permitiría a los laboratorios reducir los costes operativos y centrar mejor sus operaciones en torno a las necesidades de los pacientes. Los sistemas y analizadores automatizados pueden incluso contribuir a que los laboratorios puedan optimizar el uso de su personal en responsabilidades de mayor valor añadido.
Para los laboratorios comprometidos con mantenerse competitivos en el futuro, es esencial aprovechar las principales tecnologías de hoy en día.
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Hoy en día, las sociedades globalizadas y las poblaciones cada vez más densas dificultan el control de las enfermedades infecciosas. Estos factores plantean un gran desafío a los sistemas sanitarios y los gobiernos, poniendo de relieve la necesidad de pruebas de laboratorio rápidas, exactas y eficaces.
El verdadero alcance de este desafío quedó claro en los primeros meses de 2020, cuando el nuevo virus SARS-CoV-2 cogió al mundo desprevenido. Lo que comenzó como algunos casos notificados de neumonía en China pronto se transformó en una crisis global, que paró las economías mundiales y puso al límite los sistemas sanitarios. Los brotes anteriores ofrecieron alguna orientación sobre cómo gestionar la enfermedad, en particular la práctica del distanciamiento social y las pruebas diagnósticas de alta calidad.
Los avances en el análisis molecular lo han hecho más accesible, eliminando procesos manuales complejos y lentos e implantando en su lugar soluciones totalmente automatizadas. Reduciendo los errores y aumentando la eficiencia, los laboratorios pueden cubrir mejor las necesidades de las comunidades a las que sirven, al tiempo que aseguran su propia sostenibilidad a largo plazo en un entorno sanitario competitivo.
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Ya existen laboratorios totalmente automatizados con operaciones eficientes y están ampliando los límites de la prestación de servicios sanitarios. Los máximos responsables de los laboratorios están buscando nuevas tecnologías y soluciones sostenibles para mantenerse competitivos, y la respuesta ya está aquí.